Intolerancias
Se entiende por intolerancia a los alimentos a la incapacidad de consumir ciertos alimentos o nutrientes sin sufrir efectos adversos
sobre la salud. Los efectos pueden ser más o menos rápidos sobre la salud. La intolerancia a los alimentos se distingue de la alergia a alimentos en
que esta última provoca una respuesta del sistema inmune
Los términos intolerancia alimentaria” y “sensibilidad alimentaria” se utilizan indistintamente para denominar toda reacción adversa a los alimentos diferente de la clásica alergia. En general, las reacciones adversas a los alimentos pueden dividirse en dos grupos:
1- reacciones de naturaleza inmunológica
2- reacciones no inmunológicas.
Dentro de las reacciones inmunológicas, la más común y estudiada es la
hipersensibilidad inmediata, conocida como clásicamente como “alergia”, en este caso, alergia alimentaria. Este fenómeno se caracteriza por aparecer de forma inmediata tras la ingesta del alimento. El cuadro clínico clásico de alergia incluye
edemas, diarrea, urticaria, eczema, asma o anafilaxia. Su detección en el laboratorio se realiza determinando los niveles en el suero de manera específica con respecto a los alimentos que se sospecha puedan desencadenar la reacción. En este tipo de alergia, hay una reacción
causa-efecto muy rápida, de forma que las manifestaciones aparecen a las pocas horas de haber ingerido el alimento desencadenante y suelen ser clínicamente evidentes.